Pastillita para el Alma 26 – 09 – 2025
Hay personas que nacen con estrella y otros, … estrellados, en el decir de la gente, sobre todo cuando son triunfadores en la vida y de los otros, víctimas de infortunios y a pesar de sus esfuerzos, llegan a la vejez, arrinconados y olvidados, abandonados por su pareja y aún de sus hijos, mientras los primeros, se casan bien, con profesionales exitosos y gente solvente, para ser mantenidos y gozar de una vida disipada, sin preocupaciones y retozar a pierna suelta y sin ninguna vergüenza de su pareja, al que lo llevan cada día a la ruina, por sus gastos descontrolados, tanto con regios vestidos de seda y tafetán, zapatos de charol con tacos de punta de aguja, de moda en París, Londres y Berlín, selecta y excelente comida escogida, para su delicado paladar y toda deuda, cancelada con la tarjeta platinum de su cónyuge, … mujeres ostentosas y vanidosas, de figuras esculturales, a las que el paso de los años cobran factura, causando arrugas, hipercromías y sequedades de la piel y tal … como las flores hermosas y perfumadas, colocadas en un hermoso florero de cristal, también se marchitan y malogran, por más que lo riegues con agua de abundante amor o busques la ayuda del milagroso bisturí en manos de expertos y caros fabricadores de belleza, los cuales, muchas veces, no consiguen satisfacer sus exigencias, aunque, ponen todo su esfuerzo, para lograr disimular, lo que el viento se llevó, a cambio de enormes emolumentos, aumentando el descalabro del infortunado aportante.
No podemos ignorar ni desconocer los avances de la Dermatología previniendo el deterioro de la piel con el empleo de tratamientos y aparatos de última generación, así como los últimos adelantos en la Cirugía Plástica en el campo de la estética, mediante modernos equipos y valiosos procedimientos médicos y quirúrgicos, con resultados alentadores y sobre todo en manos expertas y honestas, así como el apoyo de los especialistas en el manejo del comportamiento emotivo de los pacientes, sobre todo en aquellos que “piden más” de lo que la Ciencia y la habilidad de los cirujanos pueden conseguir.
En el campo de recuperar la belleza, no solo es patrimonio del sexo femenino, también es muy frecuente en el sexo fuerte, especialmente en “creídos conquistadores super varoniles” los famosos bragueteros, asiduos concurrentes a los establecimientos de belleza, para recibir masajes relajantes y a los consultorios dermatológicos, por las manchitas en el rostro, la caída del cabello y la disminución o desaparición de sus hormonas masculinas, campo abundante actualmente, en el que la pastillita azul, aún en doble dosis ya no da resultados y menos los consejos de la inteligencia artificial, lo que ha dado resultado a la aparición de una nueva especialidad, la Medicina y la Cirugía Estética Genital, tierra fértil muy “privada y quizás necesaria en el sexo femenino”, pero, con muy lamentables consecuencias para aquellos señoritos deseosos de una buena función de su órgano fálico que, … en manos profesionales y éticas, es aceptable, … más no en aquellos facinerosos que ofrecen aumento de tamaño y aún de grosor mediante el empleo de “gel de silicona” u otros parecidos y desconocidos para mí.
En estos últimos tiempos en que tengo la gran oportunidad de dialogar con alumnos del último año de Medicina de las diferentes y abundantes Facultades de formación profesional, me doy con la sorpresa que, un gran porcentaje de futuros médicos, ven con mucha preferencia las especialidades de Dermatología y de Cirugía Plástica, muchos de ellos opinan que la gran cantidad de equipos modernos y advenimiento y desarrollo de la inteligencia artificial es una gran “competencia” en el diagnóstico y tratamiento de las enfermedades e inclusive la cirugía robótica está reemplazando al hombre y que en la Dermatología y la Cirugía Plática, todavía prevalece, la habilidad y la creatividad del ser humano a lo cual se suma la vanidad y el aspecto físico para conseguir empleos, papeles fundamentales para escoger las especialidades que antes no eran tan consideradas y ahora se obtienen buenos réditos y beneficios.
Para nosotros, los médicos del siglo pasado, fieles a los principios que dictó nuestra vocación y al ejemplo que inspiraron nuestros maestros y los humildes señores médicos caminando las calles y cargando su maletín negro, con su estetoscopio, tensiómetro, termómetro, su linterna, su martillito de percusión y su block de recetas, nos dio la razón de “ser como somos” y nos convenció de que la almohada más blanda y cómoda, para evitar el insomnio, es tener nuestra conciencia limpia que nos permite dormir plácidamente.
Jorge REINA Noriega
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