La discriminación racial, la palpé yo desde niño, desde la vida familiar escolar y laboral. 

Lo que sí me causó mucho dolor fue cuando ya adulto, tuve la oportunidad de caminar por las calles de Miraflores en la ciudad de Lima, donde unos Señores muy blanquitos ellos al percatarse que se iban a encontrar conmigo, ponían una cara de terror, aseguraban los objetos que traían consigo y hasta se cambiaban de vereda para no chocarse conmigo. 

En otra ocasión, y hace un par de años atrás, y ya como docente, los iluminados de la Derrama Magisterial no tuvieron mejor idea que realizar el Congreso Internacional de Educación Encinas en la sede del Colegio Médico del Perú, el cual si no me equivoco está ubicado en el distrito de San Isidro. Ello, según mi percepción los organizadores lo hacían con la finalidad de mostrar la opulencia en la que viven la cúpula de esta institución con el dinero de los profesores.

Esto fue sin  duda un acto vil con aquellos docentes que somos y trabajamos en la zona rural del Perú profundo, puesto que la mayoría de nosotros por no decir todos, acudimos a esas jornadas de capacitación haciendo un gran esfuerzo económico incluso haciendo préstamos para mejorar nuestras capacidades profesionales. 

Ahí sentí la discriminación de parte de los mismos trabajadores de la Derrama Magisterial que les lanzaban improperios e insultos a mis colegas pues según ellos no hacíamos un buen uso de los servicios higiénicos. Algunos de esos trabajadores muy bien ataviados, nos miraban con tan evidente desprecio que a mí me hacía sentir muy mal. 

Ni hablar cuando salíamos a las calles en la búsqueda de un plato de comida pues en aquel lugar los precios de las comidas son muy exorbitantes que teníamos que aguantarnos el hambre todo el día para comer algo llegando a casa. Algunos hermanos docentes llevaban sus tapers con comida preparada y se ponían a comer en las veredas de los vecinos del lugar, quienes al verlos por sus cámaras externas inmediatamente salían a pedirles que se retiren o hasta llamaban al serenazgo para que los echen del lugar.

Por su puesto, y lo peor es que lo hacemos entre nosotros mismos que provenimos de nuestra raza inca, o en todo caso de la combinación de una multiplicidad de razas pero que al final, todos llevamos la misma sangre que corre por nuestras venas.

Hoy, por la coyuntura se ha puesto en evidencia nuevamente esta situación, y lo peor que nos está enfrentando en el peor momento de nuestra historia donde deberíamos estar más unidos que nunca. 

También es muy cierto, sino queridos amigos, analicen por un momento lo que muestran los medios de comunicación y sobre todo, las redes sociales.

Hoy, nuestro Perú está más polarizado que nunca y ese enfrentamiento según mi percepción nos está llevando a la peor desgracia de la cual no podremos salir si es que no tomamos medidas urgentes desde la base, sobre todo a nivel personal y familiar puesto que a nivel de comunidad o estado, la suerte parece estar ya echada. 

En mi parecer son las dos cosas y ante ello quiero decir lo siguiente:

Los verdaderos CHOLOS, usamos nuestro poncho para protegernos del frío, nos ponemos nuestros llanques o nuestras botas de jebe para trabajar en el barro, entre las piedras y hasta dentro del agua. 

Nosotros los verdaderos CHOLOS usamos el chullo y también el sombrero para cuidar la cabeza de quienes pretenden, llenar nuestras mentes de absurdas ideas. 

Nosotros los CHOLOS, montamos a caballo para recorrer travesías, por escabrosos caminos en busca del bien,  de nuestras familias, ya que vivimos distanciados, en el paraje del olvido. 

Nosotros, los verdaderos CHOLOS no vivimos de política, pues tan solo nos basta, nuestro humilde trabajo, para estar muy tranquilos, con nuestros hermanos. 

Nosotros, los auténticos CHOLOS no buscamos el dinero ni el poder pues vivimos con poco y tan solo pedimos,  tan solo respeto. 

Nosotros los CHOLOS tan solo sabemos de unión entre hermanos, y no promovemos el dividir ni restar, tan solo buscamos el sumar limpiamente, con respeto y trabajo. 

A los que hoy pretenden meternos ideas violentistas para llegar al poder les digo:

Que no se equivoquen, pues no se imaginan, que el pueblo es muy sabio y son vuestros actos, que nos abren los ojos para ver con sapiencia, quizás más que ustedes.

A los que durante 200 años y más se han creído dueños de nuestras vidas y que aún pretenden mantenernos sumisos también les digo:

Señores todopoderosos, el pueblo ya despertó, quizás estemos pasando los momentos más álgidos de nuestras vidas, quizás se nos vinieron todas las desgracias juntas, sin embargo estoy seguro que estamos ante una situación muy crucial de nuestra historia pues coincidentemente con los 200 años de independencia nuestro Perú Milenario, el de todas las sangres, el que nos pertenece a todos, ese Perú está a punto de independizarse del coloniaje de los propios peruanos que por siglos nos han sometido a la explotación del peruano "rico" al peruano humilde.

Finalmente, quiero decir que las aguas están discurriendo por lugares impensados. Quizás esto cause un terremoto en la vida de todos pero como sabrán ustedes estimados amigos, hasta los peores movimientos sísmicos suceden debido a que en lo más profundo de nuestro planeta así como en la memoria de nuestras sociedades, las cosas se tienen que acomodarse en el lugar que les corresponde. 

Solamente les pido que seamos fuertes, que actuemos con mucha inteligencia, que seamos agentes de mejora y de unidad siempre y que Dios nos acompañe en este duro camino.