Bien por fin se acabaron las elecciones extraordinarias y nuestro querido y aguantador departamento de Amazonas está estrenando a dos congresistas, entre ellos al Dr. Absalón Montoya que reivindica a la izquierda amazonense, que desde la época del profesor Jorge Lincoln Ruiz Tejedo, al que el partido aprista le robo la elección, no decía esta boca es mía, a no ser por las esporádicas marchas de protesta, exigiendo su platita, donde el glorioso SUTEP, hoy el alicaído SUTEP, nos sorprendió con el apoyo del voto del magisterio amazonense a favor de un médico y no de los docentes que se presentaron también, enarbolando las banderas de la izquierda más desunida que nunca.

Pero en fin triunfo un candidato de la izquierda y los rojos están de plácemes y el ex cura Arana, el más más del Frente Amplio, más feliz que sacerdote luego de bautismo masivo, porque va a gorrear a los padres y padrinos de los muchachillos recién bautizados y encima se lleva un poquito de los capillos, hoy tendrá una bancada un poquito más numerosa y pensamos que más obedientes que la disuelta.

Por otro lado la derecha amazonense eligió como segundo congresista al profesor Grimaldo Vásquez Ta ta ta tan...con el voto mayoritario de las cálidas Baguas pero con la excepción de los ciudadanos de Luya y de Lamud, por algo será. En esta oportunidad, don Grimaldito, como también lo conocen sus allegados y favorecidos, tuvo como vientre de alquiler al corazón de Somos Perú, en otras palabras tuvo un corazón de alquiler en esta contienda congresal. ¿Cuáles serán los movimientos o partidos que alquile don Grimaldito en la próxima contienda regional?, solo él y nuestros shucas mensajeros lo saben. Ya lo estaremos informando a su debido tiempo.

Desde las cálidas Baguas norteñas se siguen escuchando los gritos de lamento al haber perdido, según ellos, la gran oportunidad que les puso el presidente Vizcarra en estas elecciones congresales extraordinarias, solo y únicamente por dividirse el voto mayoritario entre sus mismos paisanos, ya que en la provincia más poblada de la región, la sedienta Utcubamba, se inscribieron ante el JNE, más de diez candidatos, todos querían ser los elegidos, es mas no importaba ser pegalones de mujeres, deudores de alimentos y desubicados parlanchines de medios de comunicación, que querían llegar a como dé lugar al Congreso de la República, con la única finalidad de salir de misios en este corto tiempo legislativo; en fin no les ligo y se preparan para el 2021, donde según nos informan, pondrán un solo candidato de consenso, lo cual lo dudamos tremendamente, por la mezquindad de la clase política.

Tengo entendido que ya hay un nuevo jefe de la región policial Amazonas, y como siempre sucede en nuestra tierra, los subalternos y allegados a ellos pusieron en marcha la maniobra de bienvenida al jefezaso, con la captura de narquitos que transportaban tres kilos de pasta básica de cocaína, como lo conocen los policías especializados. Convocaron a conferencia de prensa y movieron toda la parafernalia publicitaria, para que el nuevo jefe policial regional, piense, crea, suponga, que el narcotráfico en nuestra región está controlado y que la policía ubicada en Rodríguez de Mendoza, Bongará y otros punto rojos o blancos del narcotráfico, esta fríamente controlado, que tal patraña la que le armaron al coronel como bienvenida. Solo nos queda repetir lo que denunció su colega en situación de retiro José Luis Sánchez Lira, que son los mismos policías los que frustran los operativos contra el narcotráfico en nuestra región, y que ya es costumbre que cuando hay cambio de jefes atrapan a los más tontitos o babosos, como chivos expiatorios, para que los narcotraficantes hagan de las suyas, en la gigantesca lavandería de dinero del narcotráfico en la que se está convirtiendo nuestra bella ciudad, con el aval de las autoridades. A estar atentos.

Como siempre y cada vez que me ausento de mi querida tierra por razones diferentes, hay una gentuza que aprovecha el silencio cómplice de los medios de comunicación locales, para hacer de las suyas. De la noche a la mañana se ha formado una seuda Asociación de Jóvenes Emprendedores, que se han posicionado de terrenos entre los límites de Pedro Castro, 16 de Octubre y Santa Rosa de Lima, el motivo que esgrime la seuda Asociación, es que por falta de terrenos en nuestra sufrida ciudad Fidelísima, han visto por conveniente invadir dichos predios que han sido comprados a los representantes de la sucesión de la familia Zubiate, que si nos descuidamos venden hasta las iglesias de nuestra tierra. Pero hablemos claro y sin tapujos como siempre lo hacemos, el contrato de compra venta no tendría nada de malo ni tampoco de ilegal, siempre y cuando se muestren papeles que sustenten esta transacción, donde dichos terrenos ahora son áreas forestales, que fue el trabajo de muchos años de cuidado y dedicación por parte de los comuneros de, Santa Rosa de Lima de Pedro Castro, y en ningún momento estuvo o estuvieron la familia Zubiate, que hasta donde sabemos no han sembrado ni una ramita de culantro o shil shil, y menos los jóvenes emprendedores, como reza el nombresito de dicha Asociación, donde resaltan un frustrado candidato al congreso, que grita desde una radio y una vieja conocida invasora y traficante de terrenos ajenos. ¿Escuchará la autoridad ambiental, tal vez el gran Fiscal provincial de la Fiscalía Especializada en Materia Ambiental, que siempre pasa desapercibido en estos menesteres?, harán algo al respecto o como siempre sucede en nuestra querida tierra, primaran sobre todo, las componendas, esas de los que más tienen, en desmedro de nuestra Fidelísima ciudad de Chachapoyas y de las familias pobres que necesitan casa para vivir, pero no pertenecen a las mafias de traficantes de terrenos.

El domingo viaje en el tren eléctrico, por primera vez en mi vida me subí al moderno medio de transporte rápido de nuestra Lima capital, o como la se llamar, Lima la sucia. Bueno en fin la experiencia fue única, desde el momento en que me subí en la estación de Angamos, me dirigía al cementerio el Ángel a visitar la tumba donde están enterrados los cuerpos de mis padres, toda una odisea, para alguien que está acostumbrado a que no lo empujen y menos me aprieten y sobre todo en el verano calcinante de Lima la sucia.

Recordé que esta gran obra se inició con el robo del primer gobierno de Alan y el negociado de Siracusa, pero en fin eso los contaré en otro momento. Los pasajeros esperamos pacientemente la llegada de los vagones del tren que solo demoran pocos minutos para abordar, entre empujones, sudores y olores nada agradables, uno viaja como deben de viajar las sardinas que van directo a los supermercados, con la diferencia que ellas no sudan como sudamos los que viajamos en el tren eléctrico, a pesar que me dicen que hay aire acondicionado, algo que nunca lo disfrute.

No sé si es por el verano o por ser día domingo pero el tren iba lleno, y los apretujones y los olores a sobaco, a la orden del día. Pensaba que diferente se ve en la televisión cuando detienen a algún mañoso que se acercó a una dama con intensiones libidinosas y son capturados por la seguridad del tren. Bienecho decimos desde el otro lado de la tele, pero en vivo y en directo la cosa es completamente diferente y me explico; como no rosar involuntariamente por cierto, si suben venezolanas con traseros doble extralarge, a donde podemos retíranos si el potazo en mención, ocupa más de medio pasadizo del tren. Felizmente pensé soy un poco delgado y no tan chato para soportar, como soporte el susodicho viaje, el cual tuve que repetir de regreso, luego de elevar mis oraciones en la tumbas de mis padresitos y despedirme hasta otra oportunidad.

El retorno, casi una copia del viaje de ida, con la yapita que un ratero que subió en la estación Presbítero Maestro que está en las inmediaciones de la temida Huerta Perdida, por poco me deja sin mi billetera, que dicho sea de paso solo tenía veinte soles de efectivo y tarjetas de crédito, que solo me sirven para pagar lo que debo al banco. Se me ocurrió que nuestros flamantes congresistas deberían presentar un proyecto de ley, para que el ratero que te robe la billetera o cartera, donde tienes tus tarjetas, se quede con el dinero en efectivo, pero a cambio pague la cuota respectiva de la deuda del mes que se tiene con el banco, digo, mientras dure el trámite para obtener un duplicado de la tarjeta robada.