08/08/23 - 06:38
Es difícil encontrar un titular adecuado para describir o comentar la segunda gestión del gobernador Gilmer Horna Corrales. Esto se debe, no tanto a la falta de adjetivos para calificar lo que todos sufrimos debido a la inercia de nuestro departamento y al servilismo de los profesionales que se sientan en la mesa servida, en alusión a la empresa del gobernador.
Nuestra principal preocupación radica en que ya han pasado ocho meses y hemos superado el medio año del almanaque sin ver una clara dirección para el desarrollo de nuestra región, que fueron las promesas del candidato Horna, quien rogaba de rodillas y con las manos juntas en señal de oración al Señor, para tener un buen gobierno. Todos recordamos su acto teatral y hasta nos reíamos de su habilidad para conquistar al electarado.
Hoy, en plena fiesta patronal de la Mama Asunta, los días siguen pasando sin ningún anuncio de obras importantes. Todos estamos atentos a lo que ha descubierto la Oficina Regional de la Contraloría Amazonas, que luego de una exhaustiva revisión determinó que muchos de los funcionarios de confianza nombrados por Horna Corrales no cumplen con los requisitos mínimos para ocupar el cargo que tuvieron durante siete meses y seguir cobrando un sueldo que no les correspondía.
Desde nuestra modesta opinión, nos preguntamos: ¿Qué labor de fiscalización cumplen los consejeros regionales, que se reúnen casualmente para rendir cuentas a la población sobre el trabajo por el cual fueron elegidos? ¿Siguen encubriendo todas las trampas de los funcionarios y lo único que les interesa es ganar dinero y recibir beneficios de algunas obras dirigidas? ¿Seguirán acompañando al gobernador como enanitos que siguen a Blanca Nieves, durante las fiestas patronales de las provincias y distritos de nuestra región?
Este fin de semana, el gobernador Horna Corrales ha encargado, no sabemos por cuánto tiempo, a la vicegobernadora Leyda Rimarachín la conducción de la gobernación. ¿Qué pasa con Horna? ¿Pretende gobernar virtualmente como la presidente Dina Baluarte? La verdad es que no lo sabemos, y los consejeros regionales tampoco. El secretismo con el que se mueven las fichas en Canchul Huayco es desesperante y el tiempo sigue avanzando.
En cuanto al movimiento de los funcionarios que no calificaban para el cargo que recibieron desde enero de este año, al inicio de esta segunda gestión, "no pacha nada", como decía un gran amigo. Los cambios se han hecho como una burla para la población, son los mismos de siempre y los conocemos hasta el hartazgo, sabemos muy bien de qué pie cojean.
El ingeniero Leoncio Temoche Castro deja el cargo de gerente general y sube al tercer piso para ocupar el cargo de Asesor Dos, ya que el cargo de Asesor Uno, está ocupado por el inamovible Rony García. Hoy, cuando ya hemos entrado al octavo mes del año, se estrena como gerente general el Licenciado en Administración, Elvis Elder Becerra Vásquez, quien debe poner en marcha el carro del gobierno regional a toda velocidad para recuperar el tiempo perdido, mientras el titular sigue gobernando virtualmente y la vice sigue opacando su alicaída y desgastada figura de político mediocre.
