Hay personas a los cuales no es necesario conocerle mucho tiempo, para descubrir la pureza de corazón y su calidad humana, pues a través de la claridad de sus ojos reflejan sus sentimientos y la transparencia de su espíritu. Conocí al señor don Guillermo Gal´Lino en forma muy circunstancial, cuando preguntaba cómo iba a lograr para que ingresen, como voluntarios, dos doctores al Cuerpo de Bomberos del Perú, en el parvís del templo de Benjamín Pérez Treviño y desde allí nació una amistad incuestionable.

Reconocí en este hombre de estampa erguida, de mirada profunda, de actitudes caballerescas, de conversación precisa y elocuente, un personaje que decía lo que sentía, con frases cortas y convincentes, en los cuales sus ademanes y comportamiento, nos mostraba a un señor que era extraño a nuestro medio cultural, y es así como me entero que venía de Australia, con la intención de repotenciar su planta de desinfección con rayos gamma, fábrica única en el Perú y la mayor de toda América Latina.

Guillermo Gal´Lino, es nacido en Lima Perú, un 07 de abril de 1943. Su padre don Víctor Manuel, que hizo el primer raid de Nueva York Lima, volando en un avión, de aquellos tiempos y sin escalas; su madre la dama señora doña Rosa Amelia Olguín Burga. Estudia su educación primaria y secundaria en Lima e ingresa a la Universidad Agraria de La Molina, recibiéndose de ingeniero agrónomo. Contrae matrimonio con la señorita doña Eda Pérez Treviño Parks, y con la cual tiene 3 hijas, que les llenan de cariño y felicidad.  

Guillermo Gal´Lino es un empresario en todo el buen sentido de la palabra. Un personaje que sabe el valor del tiempo, que entiende que, el trabajo es una virtud que ennoblece al hombre y con su honestidad y valentía, es capaz de enfrentarse a todos los escollos que le ponen en su sendero, como así lo ha demostrado al ponerse al frente a la enfermiza burocracia que abunda en nuestro país y que no lo han logrado doblegar.

Un investigador nato, preocupado siempre en mejorar la salud de la población, lo que se explica con su planta de rayos gamma, que ofrece la esterilización de artículos de pan llevar, que deben ser utilizados en el consumo diario de los alimentos de la población en general, previniendo males e infecciones y a la vez, exportados, libres de contaminación bacteriana, viral y fúngica, lo cual no ha sido entendido por las autoridades de turno y es uno de los grandes obstáculos con lo que sigue luchando nuestro muy Q H Guillermo. Como ingeniero agrónomo cultiva muchísimas hectáreas de cúrcuma y jengibre en sus plantaciones de los valles de la región del Cuzco, exportando toneladas, como materia prima, de productos a la república popular China, los que se encargan de manufacturarlas y procesarlas para devolvernos como medicinas complementarias a precios elevados, lo que constituye un gran dolor de cabeza para nuestro buen empresario que, no comprende, como en nuestro medio no haya inversión de pequeñas y medianas empresas que nos pongan a la altura de empresarios extranjeros.

Nuestro Q H, el señor don Guillermo Gal ‘Lino Olgúin, pertenece a nuestra Augusta Orden de hombres libres y de buenas costumbres y durante el tiempo en que ha permanecido en nuestro oriente, ha asistido casi regularmente a nuestros trabajos, mostrándonos su carácter magnánimo, conservador de los usos y costumbres, muy pegado a nuestro ritual y simbolismo, pero cauteloso y prudente observador del comportamiento fraternal de los RR y QQ HH, sobre todo teniendo en cuenta que nuestra A B R L S “BENJAMÍN PÉREZ TREVIÑO”, lleva el nombre del abuelo de su amada esposa, nuestra querida hermana doña Eda Pérez Treviño Parks.

Muchas cosas desearía transcribir al papel de todas las virtudes y también, defectos de este gran hombre de ponen das, pero mis frases son limitadas para retratar en su verdadera dimensión a un caballero que lleva en su sangre su afán de servicio y su amor para hacer el Bien y sobre todo su entereza de enfrentar las dificultades y nunca someterse a las vejaciones, que como lluvia con granizo ha tenido que afrontar ante la indiferencia, o quizás ignorancia, de los que hacían oídos sordos ante sus bien sustentadas opiniones.

Ahora me toca mi querido hermano, don Guillermo Gal ´Lindo Olguín, decirle, talvez adios para siempre, a mí ya no me permitirá el tiempo volver a tener la suerte de volver a veros materialmente, sin embargo en esta época del modernismo con la Inteligencia Artificial y todos los adelantos, ha de querer quizás, nuestro Ser Supremo, volver a vernos en forma digital y solo os pido que sea una realidad ese puente de unión qué, gracias a vuestra buena voluntad, se haga entre nuestros dos orientes y ese distrito de Ate, donde muchas veces ha sido mudo testigo de vuestras angustias y preocupaciones, lo recuerde, en la crudeza del modo de vivir de sus pobladores, que nuestra Logia del Amor, tiene entre sus funciones sus acciones de caridad con los desposeídos y que para ellos cualquier migaja es pan bendito y llévese la seguridad que vuestro querido nombre siempre será recordado y nunca será borrado por el viento letal del olvido y vuestro nombre quedará grabado en el corazón de vuestros hermanos que ahora le dan un abrazo de tierna y fraternal despedida.