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CONVERSACIÓN EN EL VATICAN0

Luis Alberto Arista Montoya* En las “cocina periodística” (mesa de redacción de diarios y revistas) se usa con frecuencia la frase: “una imagen vale por mil palabras”,

 CONVERSACIÓN EN EL VATICAN0



03/05/25 - 13:28

Luis Alberto Arista Montoya*

En las “cocina periodística” (mesa de redacción de diarios y revistas) se usa con frecuencia la frase: “una imagen vale por mil palabras”, para referirse a la evidencia contundente de una fotografía, un video, un audio, sea para confirmar o desmentir una noticia.

Esto no es una sentencia absoluta, es relativa. Si la imagen no tiene por lo menos una leyenda, se vuelve ante los lectores- sobre todo ante los menos instruidos- en un símbolo o signo mudo. Casi siempre “la medida de todas las cosas es el hombre”, nos la enseñó el filósofo griego Protágoras. Cada uno mira el mundo de acuerdo con su formación e intereses.

Esto viene a cuento a propósito del austero sepelio de los restos del Papa Francisco, transmitido instantáneamente a través de la TV y de las redes sociales. El domingo 27 de abril, casi todos los diarios del mundo publicaron dos fotografías icónicas: la del humilde ataúd del Papa, confeccionado de madera artesanal, conteniendo su cuerpo(imagen) inmortal; y la otra foto sobre la reunión, a solas, de Trump-Zelenski captada en un ambiente de la iglesia de San Pedro, epicentro del Vaticano. Los dos están dialogando frente a frente, sentados en sobrias sillas. Sin la parafernalia del poder (Trump) y del no poder (Zelenski), como sucedió la primera vez en la sala oval de la Casa Blanca, donde un Trump- ofuscado narcisista- regañó a la presidente de Ucrania, sin ocultar su preferencia por el invasor Putin (quien, digamos de paso, no asistió a los funerales por ser ateo, y porque se siente un “dios”, un gran “oso” de las estepas siberianas.

Como se sabe el joven presidente ucraniano Volodimir  Zelenski, y Donald Trump se reunieron brevemente, antes del funeral del Papa Francisco. El departamento de prensa de la Presidencia ucraniana, así lo anunció, unas horas después de que el mandatario estadounidense afirmara que Kiev y Moscú, en guerra desde el 2022, están “muy cerca de un acuerdo”.

¿Cuál fue el tenor de dicho diálogo? Nadie lo sabrá hasta que uno de ellos lo delate. La foto es elocuente, insólita, inesperada. Se trata de la soledad de dos poderes: del poder imperial (representado por el poder del que se cree el papá del mundo), y del poder colonizado (representado por el hijo “vasallo”, pero resistente).

 Por hoy solo podemos esgrimir una aventurada hipótesis: como en la foto “aparece” humildemente cabizbajo Trump, con los dedos cruzados de las manos, sin hacer aspavientos, y Zelenski está mirando fijamente (sin parpadear, sé supone) a su interlocutor, con la cabeza altiva, pero también con los dedos cruzados, se supone que el diálogo fue “amigable”, de tú a tú. El lenguaje corporal, de los gestos es importante, sobre todo en política. Hay que saber leerlo.

Dicen algunos analistas internacionales que el poderoso   Trump se ha dado cuenta que  Zolenski no dará su mano a torcer, su fuerza y carisma de líder tienen apoyo universal, sobre todo en la Unión Europea; y que la terquedad imperialista de Putin- que busca ser también papá del mundo – ha defraudado los planes geopolíticos y económicos de Trump, y que su alianza militar con China (gobernado por otro que quiere ser papá mundial) es un peligro para su ambicioso poder: de ser el único papá universal, cuya idea se lo ha vendido Elon Musk, el hombre más rico del mundo, su asesor neonazi

En la foto comentada el viejo Trump porta su sempiterno traje azulino con una corbata menos chillona de la normal que suele usar (rojo  encendido); mientras que el joven Zelenski  lleva puesto una casaca, un pantalón y unas zapatillas de color negro (de acuerdo a la tradición del luto católico-un atuendo normal, humilde, franciscano).

Finalizo, ironizando e imaginando ese breve diálogo:

-Trump: Que tal, como te va, ¿deseas beber una cerveza?

-Zelenski: No gracias, más respeto por Francisco; esta es una “conversación en el Vaticano”, no es una “conversación en la catedral” [ bar, donde unos periodistas peruanos noctámbulos-incluido Mario Vargas Llosa- solían reunirse a beber cerveza, luego de cerrar la edición del diario La Crónica con un buen titular y una gran foto abridora.

- Trump: Bueno, yo mando y comando aquí y ahora.

- Zelenski: Eso te lo ha hecho creer tu asesor Elon Musk, yo desobedezco y mando junto a mi pueblo de Ucrania

- Trump: Entonces, aprovecha que nadie nos escucha, ni la CIA ni la KGB, y dime bajito ¿quién soy yo?

- Zelenski: No lo sé. Más bien dime ¿quién crees ser? ¿Qué quieres ser?

- Trump: Soy Papá, cojudo, “machucao”, entonces pues…

- Zelenski: Yo no soy ni me siento  “machucao”  de nadie : de ningún papá todopoderoso. Cuidado, que tus hijos (súbditos) de dentro se rebelen y terminen tiñendo tu cabello de negro y ensortijándolo… y ahí sí sería el acabose…Chau, hasta la próxima pasteurina. Cumple  con tus promesas de campaña. Chau.

-Trump: grita y dice: “¡Hasta la próxima coca cola dirás!, y no sigas jodiendo, “cuando vuelvo regreso”, chau
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*EDITORIAL. Radio Reina de la Selva. 3 de mayo de 2025. Luis Alberto Arista Montoya.

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